Que el acto sexual sea un encuentro en el que los miembros de la pareja se sientan enriquecidos, sin tabúes, temores ni presiones, conlleva una necesidad de apertura en múltiples aspectos. Porque aunque el sexo sea la experiencia más elevada por la que todo ser humano pueda pasar, no todo el mundo tiene acceso a mantener una 'sexualidad sana'. Se recibió como psicóloga de consultorio en el año 1977, y 2 años después comenzó su capacitación en Sexología. En 1983, Mar del Plata la recibió con el ímpetu y la liberación que caracterizó a los años pos Dictadura Militar: “cuando comencé a trabajar como sexóloga fui la primera en Mar del Plata, así que arranqué sin competencia, abrí un campo nuevo en al ciudad. Era muy novedoso que se hablara de sexo” cuenta Elda Bartolucci. La respuesta de la ciudad a su profesión no fue rápida. “Fue muy de a poco que me empezaron a llegar casos de disfunciones sexuales”, dice. Aunque ya con 25 años de experiencia en su haber, la licenciada Bartolucci aprecia que “ahora estoy atendiendo a una segunda generación de marplatenses: he atendido a los padres y ahora empiezan a venir los hijos”. Sin embargo, la sexología hoy sigue siendo una especialidad que no está nutrida de profesionales en Mar del Plata. “Sexólogos en Mar del Plata seremos 4 o 5 acreditados por la Federación Latinoamericana de Sociedades de Sexología o por la Asociación Mundial de Sexología” apunta, aclarando que “hay muchos urólogos que dicen atender disfunciones sexuales, pero no son como sexólogos, no tienen una comprensión más amplia que la ´erectología´: parar un pene. Y se necesita una mirada psicológica para pensar la sexualidad”. La profesional comenzó a allanarse el difícil camino de abordar la sexualidad de los marplatenses dictando educación sexual en los colegios, haciendo apariciones en medios de comunicación, y dedicándose paralelamente a la sexología clínica desde su consultorio. De a poco, fue especializándose en aspectos de la pareja y los trastornos del amor y de la soledad. Actualmente, trabaja sobre todo con trastornos sexuales y realizando terapias de pareja.
PRINCIPALES TRASTORNOS SEXUALES
Los llamados “trastornos sexuales” pueden tener 2 causas: una causa orgánica o una causa emocional. En el primer caso, sobre todo se da a partir de la disfunción eréctil del varón. En cuanto a las causas emocionales, las mujeres son las más propensas a padecerlas. “La erección depende de un organismo sano, un vínculo cómodo, un entorno seguro –el hábitat es muy importante, no como tener sexo en cualquier lugar-. Cualquiera de estos factores puede inhibir una erección. En varones de más de 50 podemos encontrar disfunciones eréctiles por causas cardiovasculares, o por medicamentos o abuso de psicotrópicos” señala la sexóloga. En este sentido, la consulta más frecuente que lleva a los marplatenses al sexólogo son los trastornos de eyaculación precoz. “Se dan cualquier cantidad de consultas sobre esta disfunción, sobre todo en varones de entre 20 y 40 años, son los que más consultan”. En las mujeres, lo que más habitualmente las lleva a consultar a un profesional en sexología son los trastornos en el deseo sexual. “La mayoría de los trastornos son provocados por su mala educación sexual recibida, por sus situaciones traumáticas, o por abusos en la infancia”. Aunque aclara: “disfunciones del deseo sexual se dan tanto en varones y en mujeres, luego de unos años de matrimonio, de desgano, de aburrimiento, de conflicto de pareja, trastornos por infidelidad”. Otros problemas por los que recibe consultas a diario son de “personas con dificultad para asumir su identidad sexual. Recibo muchas consultadas de padres preocupados, por tendencias homosexuales de los hijos y situaciones que no son agradables, que necesitan un apoyo que los diagnostique”. Eso sí, los que se resisten con creces a la consulta con el sexólogo son “los trastornos por adicción sexual o de perversión sexual. Generalmente al adicto sexual no le interesa consultar” reflexiona la licenciada Bartolucci.
ESA BENDITA PASTILLA
“Cuando apareció el Viagra, hace unos 10 años, se modificó la consulta” grafica la sexóloga. Desde que apareció en el mercado farmacéutico aquella medicación que se emplea por vía oral para el tratamiento de las disfunciones eréctiles, se hizo más difícil que los varones recurran al sexólogo. “Antes del Viagra recibía muchas más consultas por impotencia sexual que las que recibo ahora. El Viagra tiene una función muy específica: facilitar la erección en aquellos varones que tienen bloqueado el mecanismo por alguna razón orgánico” explica la licenciada Bartolucci. Aclara, no obstante, que muchas veces la ´pastillita azul´ “se utiliza mal: a veces los jóvenes lo utilizan porque piensan que la erección va a durar más, les da seguridad, y trae contraindicaciones”. La droga, una de las líderes de venta en la industria farmacéutica mundial, también es muy vendida en Mar del Plata. SEXO EN LA CIUDAD “En Mar del Plata cuesta mucho tratarlo en la familia o en la pareja, cuesta reconocerlo” reflexiona la sexóloga cuando se refiere al espacio y al tratamiento que la sociedad marplatense le da a la sexualidad. “Pero a nivel social el sexo vende. No es un tema que no se toque, la gente se interesa por estas temáticas. Lo que todavía hay es ignorancia respecto al sexo” opina. Con respecto a la educación sexual, Bartolucci dice que en la ciudad “no está encarada, yo voy a muchas escuelas por iniciativas aisladas, pero no hay u programa orgánico de educación sexual en Mar del Plata. Y lamentablemente en la familia se aborda muy poco. Así, los chicos no tienen información y se inician mal, no se cuidan, no tienen espacios para plantear sus inquietudes, con los padres hablan poco y nada…” Con las características de escasa educación sexual antes mencionadas, y teniendo en cuenta que la edad promedio de inicio sexual son los 15 años, la sexóloga evalúa que “es preocupante que el índice de inicio de la sexualidad está bajando sin que le demos instrumentos de educación sexual a los chicos para que se cuiden. Como sociedad nos falta mucho en este sentido”. ¿De qué manera se vislumbran más frecuentemente los tabúes sexuales, entonces?: “mucha gente no disfruta del sexo porque no ha sido bien educada sexualmente: tiene temores, no se suelta, no disfruta, es un área que se encara como pueden” apunta la profesional. “Siempre digo que nadie es buen amante en sus primeros años de su vida sexual, es como un deporte, tenés que practicarlo para perfeccionarte, conocer tu cuerpo y el cuerpo del otro, establecer una buena comunicación con la pareja, hacer el amor sin traumas y perturbaciones, sin disfunciones sexuales”. “Hay mucha gente que tiene una sexualidad muy pobre sin disfunciones específicas: que con la luz apagada, que en determinada hora, que en determinada posición, sin comunicación afectiva ni caricias” enumera sobre el final de la charla la licenciada Bartolucci. Pero, ¿para qué están los sexólogos, a pesar de que entre los marplatenses aún haya muy pocos? “La función del sexólogo es enriquecer la vida sexual. Porque el sexo es algo maravilloso con un espectro de recursos enormes”.
Entradas
